sábado, 16 de mayo de 2020

¡Hasta nunca pañal!


En muchas ocasiones los padres pensamos que es un reto para nosotros que el niño deje el pañal, pero en realidad es una aventura y un triunfo para el niño el dejarlo, pues empieza una nueva fase en su vida camino a la madurez.

Antes de nada hay que tener claro que es el niño el que tiene que estar preparado, tanto físicamente como psicológicamente. Neurológicamente el niño está preparado para comenzar a controlar los esfínteres a partir de los 18meses, pero psicológicamente a partir de los dos años podemos intentar hacerlo. Para que no sea un proceso traumático para el niño debemos interpretar correctamente las señales.

Las señales:

- Le empieza a molestar el pañal ya que empieza a intentar quitárselo o no quiere que le cambiemos el pañal.
- Menciona pis o caca, aunque no lo sepan diferenciar correctamente.
- Vemos que se fija en wáter y tiene curiosidad.
- Detectamos que hace algún tipo de señal cuando hace pis o caca (muecas, se esconde, etc...)

Es muy importante que el niño no tenga miedo al wáter, ya que si fuera así primero debemos quitarle el miedo, si no el proceso se podría complicar bastante.

Otra duda que nos suele surgir mucho ya que solemos caer en estereotipos, ¿es mejor en verano o intentarlo antes de que cumpla los dos años? La verdad que a todos nos surgen muchas dudas como… ¿Cuándo es el mejor momento? ¿Estará realmente preparado? ¿Sera difícil? ¿Cómo hacerlo? A continuación resolvemos algunas dudas.

Es muy típico decir que en verano es la mejor época para quitar los pañales y es cierto que en verano los niños llevan menos ropa o ropa más cómoda, esto hace que para ellos sea más fácil el quitarse la ropa para ir al orinal, además de que si se mojan porque se les escapa no se enfriarán. Pero como hemos comentado antes el tiempo lo marcan ellos.

Otro punto importante es tener 3/4 días como mínimo, las 24 horas con el niño, ya que necesitan toda la atención posible al principio del proceso.

Antes de empezar con el proceso debemos tener dos cosas en cuenta muy muy importantes.

1º NO PERDER LA PACIENCIA. Porque al principio tu hijo se va hacer pipí o caca, esto ocurrirá en cualquier lado, se mojara la ropa. Si perdemos la paciencia y les regañamos podemos avergonzarlos y retrasaremos el proceso. Si vemos que el niño no está listo no lo presiones, cada niño necesita su tiempo.

2º SER MUY CONSTANTE. Si empiezas el proceso y un día le quitas el pañal y otro se lo pones, confundes al niño y no vas a realizar el proceso correctamente, sino que lo vas a retrasar. En el momento que le quites el pañal no se lo pongas, salvo que veas que realmente no está preparado.


Este proceso debemos hacerlo como algo divertido. Cosas que debemos tener preparadas:

Buscar un orinal que sea divertido y sea lo más parecido a un wáter, también es muy importante que no se mueva, para que cuando se sienten estén cómodos y no resbalen.
Actualmente en el mercado existen un sinfín de orinales, llamativos, con formas, que tengan música, que cambien de color, que sean de sus dibujos preferidos o comprar uno simple y pegatinas divertidas para ponerles cada vez que lo realicen bien. Si ellos lo relacionaran como un juego y será más fácil aprender.

Otra cosa que debemos tener preparada es ropa interior cómoda y divertida. Es una prenda nueva ¿y qué mejor que sea de sus dibujos preferidos o de dibujos de cosas que le gusten?
Para este proceso también necesitaremos tener bastante ropa cómoda, ya que al principio se sentará muchas veces en el orinal o no lo controlara bien y se manchara. Deben por ellos mismos poder quitar las prendas.

Recomendamos que unas semanas antes de quitar el pañal, debemos ir indicándoles cuando les cambiamos el pañal o cuando nosotros mismos vamos hacemos nuestras funciones intestinales decirles y pedirle que nos acompañen para informarle de todo el proceso, e indicarle que hay que bajarse el pantalón, bajarse la ropa interior, sentarse... etc.. y luego decirle:  mira papa/mama está haciendo caca o mira te has hecho caca, mira papa/mama va hacer un pipi, para que se familiaricen.

Como material didáctico os recomendamos la película Elmo va al baño, esta película explica muy bien cómo ir al baño y como deben hacerlo, de una forma divertida ellos pueden entender que es algo normal.

No hay que obligarlos a sentarse en el orinal. Siempre preguntar si tiene ganas de ir al orinal. Intentar siempre hacerlo a las mismas horas, creando una rutina natural a sus horarios de ir al baño, para crear esta rutina debemos estar un par de días atento a sus rutinas, esto se debe hacer antes de empezar el proceso.

Cuando decidamos comenzar el proceso, un día antes lo dejaremos todo listo, debemos “presentarle el orinal” e indicarle que a partir de mañana vamos hacer sus necesidades en el orinal.

Empezaremos a quitarle el pañal durante el día y ver cómo reacciona nuestro hijo.

La primera semana cuando valla a llegar el momento aproximado de la hora de evacuar, estaremos atentos y en ese momento con mucha calma le llevaremos al orinal, si tu hijo aún no se ha hecho sus necesidades, lo sentaremos y ofreceremos que haga sus necesidades.
Cuando realice la primera vez bien y tras unos cuantos aplausos por su gran éxito y frase motivadora y una despedida divertida al pipi o caca.
Debemos estar nuevamente atentos durante todo el día cuando se aproximen sus horas de evacuar o veamos alguna señal que lo indique (aprox. De 2 a 4 horas), pues es lógico que el niño aún no pueda aguantar mucho tiempo.
Cuando se aproximen la horas de evacuar, no lo llevaremos y lo sentaremos, si no que esperaremos a que de las señales, nos avise o le invitaremos a ir, sin obligar. Es muy importante tener en cuenta que los primeros días, es normal que al niño se le escape algún que otro pis.

No regañar ni premiar con un regalo.
Si no lo hace correctamente, que se le escapa, únicamente le indicaremos que esto ensucia y que debe realizarlo en el orinal, podemos proponerles que nos ayuden a recoger lo que se ha manchado o a cambiarse la ropa, pero no es conveniente que le trasmitamos que da asco ya que se pueden sentir mal y esto atrasaría el proceso.

Debemos recordar que cuando sacamos el pañal durante el día, tenemos que tener cuidado de no reincorporarlo de forma precoz, si el niño marca todas las señales de que se le puede quitar el pañal, debemos ser firmes una vez comencemos el proceso.

En la segunda semana, cuando se aproxime su horario de evacuación podemos aproximarle al orinal e indicarle que puede hacer pipí o popo y sentarlo. Ya en este momento tu hijo va asociando el horario con el orinal y que debe hacer pipí o popo.
Si nos avisa debemos atenderle de inmediato, pero si no lo hace debemos dejarlo un ratito mojado (5 minutos es suficiente), para que él se dé cuenta que si no aviso con tiempo, nosotros no podemos saber que va a hacer pis, además de al sentirse incomodo se irá dando cuenta cuando le entran las ganas y se concentrara más.

Es posible  que a partir de la tercera semana ya valla asociando el acto de defecar con caca y orinar con el pipi, puede que ya te pueda avisar lo que va a realizar.

Para no crearle demasiado estrés debemos empezar por el día y cuando lo tenga controlado y lleven aprox. una semana que no moja el pañal por la noche, se lo quitaremos por la noche. En general cuando va aprendiendo a controlar el día, los pañales de la noche cada vez son más secos.
Hasta los 5 o 6 años tenemos que tener en cuenta que pueden hacerse pis por las noches, es totalmente normal.

Otra cosa a tener en cuenta es que no debemos crearles un proceso traumático encerrándolos hasta que aprendan a ir sin pañales, deben salir a la calle y hacer una vida normal, tal vez la primera semana sea complicado, pero luego deben hacerlo con normalidad.
Actualmente hay orinales portátiles, los cuales se pueden llevar y si al niño le entra una urgencia y no hay ningún wáter a mano, pueden utilizarlo, también pueden llevar bolsitas para recoger sus necesidades y que realicen sus necesidades y luego recogerlas. También tienes que tener en cuenta en las salidas que debes de llevar una bolsa con varias prendas, ropa interior y zapatos.

Un consejito, que si es niño, le enseñemos a orinar sentado en el orinal y cuando lo tenga más controlado que empiece a hacerlo de pie.

En el proceso nunca vuelvas para atrás, únicamente deberás parar el proceso si notas que has empezado muy pronto o creamos que no esta preparado.

Esperamos que te sea de utilidad.

¡¡¡Todo por una independencia y un gran ahorro!!!

¡Hasta nunca pañal!

En muchas ocasiones los padres pensamos que es un reto para nosotros que el niño deje el pañal, pero en realidad es una aventura y un tri...